El pasado 30 de mayo nos enteramos de la triste noticia de la detención de nuestro compañero Sebastián Romero en la República Oriental del Uruguay. Sebastián es militante del PSTU, nuestro partido hermano en Argentina, y dirigente obrero. Es un perseguido político desde el 18 de diciembre de 2017, por haber participado junto a miles de trabajador@s en la movilización contra la reforma previsional que implicó un brutal robo a l@s jubilad@s. Por la misma razón, su compañero Daniel Ruiz estuvo 13 meses injustamente detenido en el penal de máxima seguridad de Marcos Paz.
Después de 29 de meses de persecución, hoy Sebastián se convierte en un preso político. Compartimos la lucha en defensa de las pensiones públicas y entendemos que luchar es un derecho fundamental y jamás un delito. En una sociedad que se considera democrática es inadmisible tener presos políticos.
Exigimos al Gobierno de Uruguay que envíe de forma inmediata a Sebastián a su país y que se le permita la comunicación con sus familiares. Asimismo, exigimos la inmediata liberación sin cargos de Sebastián por parte del gobierno y la justicia argentinos.
Llamamos, también, a todas las organizaciones democráticas y de la izquierda social, política y sindical a mostrar su apoyo y solidaridad con Sebastián Romero y a pronunciarse exigiendo su libertad.
Corriente Roja nos sumamos a la campaña internacional en defensa de Sebastián y extenderemos la solidaridad poniendo todos nuestros medios a su servicio. No descansaremos hasta que Sebastián Romero esté libre.