¡Utzi pakean Altsasu! Dejad en paz a Altsasu!¡Libertad inmediata y sin cargos de las personas presas!¡Archivo inmediato de la causa judicial!
12 personas de Altsasu han sido encausadas por agresiones, atentado a la autoridad y terrorismo por los hechos ocurridos el pasado el 15 de octubre durante las fiestas. Tras ser trasladadas a Madrid para declarar ante la juez de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, ocho de estas personas se encuentran ahora mismo encarceladas.
Declaración de Korronte Gorria Nafarroa (Corriente Roja Navarra)
Lo que fue una trifulca de bar a altas horas de la madrugada entre dos guardias civiles de paisano con sus parejas y jóvenes de Altsasu, se convirtió enseguida, por arte de magia, en una “emboscada”, “linchamiento”, “agresión multitudinaria” y “brutal paliza”. Una escandalosa campaña mediática se puso en marcha en los diarios y las televisiones. La Comisión de Interior del Congreso, con los votos a favor del PP, PSOE, C’s, PNV y Podemos, se pronunció expresando su más “enérgica condena y rechazo de la brutal agresión” y mostrando su “apoyo y solidaridad con la Guardia Civil ante estas injustificadas agresiones”. Al cabo de unos días, el Fiscal de la Audiencia Nacional ha asociado la versión de los hechos aportada por la Guardia Civil con la campaña «Alde Hemendik» («Que se vayan») y los ha calificado como delito de terrorismo.
La juez, refiriéndose a la campaña «Alde Hemendik», habla de una supuesta «campaña de intimidación» a las Fuerzas de Seguridad del Estado para que abandonen Navarra y la Comunidad Autónoma Vasca. Pero es justo al revés, la intimidación, como ha denunciado la ex Alcaldesa de Altsasu, Camino Mendiluze, es la que sufren los jóvenes de Altsasu y de la Sakana en los controles e identificaciones, injustificados y arbitrarios, que efectúa la Guardia Civil. Un cuerpo de infausta memoria, que fue columna vertebral de la represión franquista sin que jamás sufriera depuración alguna, y que se ha distinguido por los malos tratos y las torturas practicados en los cuarteles vascos.
La acusación a los jóvenes de Altsasu no tiene pies ni cabeza, es un montaje político-judicial descarado, un verdadero despropósito. Ahora ya se llega al extremo de poder acusar de terrorismo sin que haya ningún vínculo con organización terrorista alguna. Repudiamos esta campaña indigna y exigimos la inmediata libertad, sin cargos, de los encarcelados, así como el archivo de la causa judicial.
Denunciamos la postura del PNV y de Podemos, que dieron apoyo y cobertura política a esta campaña votando con el PP en la Comisión de Interior del Congreso. Y tampoco es de recibo la actitud de la presidenta navarra, Uxue Barkos, que se sumó a la condena aunque luego haya criticado que se hubiera trasladado a Madrid a los detenidos y que se les acuse de terrorismo.