“¿Qué implicaciones tendría para Canarias el despliegue de la OTAN frente a África que propondrá el Gobierno de Sánchez en la próxima Cumbre de dicha organización, que tendrá lugar a finales de junio en Madrid?”. Esta es la pregunta que Manuel Domínguez, líder del PP de Canarias, va a formular en el Parlamento de la CCAA.
Según el DIARIO DE AVISOS canario, el presidente del Gobierno de España y la ministra de Defensa, Margarita Robles, han reconocido hace unos días que plantearán ante esa Cumbre un refuerzo y despliegue de la misma en su flanco Sur frente a África, a pocos meses de haber dado un giro en la política exterior, reconociendo la soberanía marroquí sobre el Sahara.
De Tratado del “Atlántico Norte” a Tratado del “Atlántico Sur”, pasando por el Norte y el Este Europeo; este es el proyecto que van a aprobar en la Cumbre que las potencias que la conforman, van a realizar en Madrid el 29 y 30 de junio próximo.
Si a ello le unimos el acuerdo más que probable de que todos los estados establezcan como mínimo de inversiones militares el 2% de su PIB, como ya anunciaron Alemania, el Estado Español e Italia, está claro el camino que el capitalismo imperialista ha adoptado; el del militarismo, recordando las tendencias guerreristas que determinaron la I y la II Guerra Mundial.
Ahora ya no es Rusia, es China
Este giro estratégico de la OTAN hacia el Sur, después de haberse movido hacia el Este europeo, viene dado no por el “desafío” ruso, sino por el del capital chino, que hoy disputa a la Unión Europea el control del continente. Así, la salida de las fuerzas francesas del Sahel les obliga a revisar la presencia de la misión militar europea en Malí, incluida la participación de España y Alemania, que son los principales contribuyentes a la veterana misión EUTM-Malí.
Para entender todos estos movimientos, veamos algunos datos económicos y militares de la semicolonización del continente africano por el capital chino.
Según El Mundo, “China expande su poder militar en África y abre su segunda base continental en Guinea Ecuatorial” para controlar la costa atlántica. Hace años que ya tiene otra base en Yibuti, en el Cuerno de África al lado de la base que estados de la OTAN tienen allí como Francia y los EEUU. Si alguien tiene curiosidad, que vea un mapa y compruebe como las Canarias son un lugar estratégico para controlar los movimientos militares chinos en África Occidental.
Por von Clausewitz sabemos que la “guerra es la política por otros medios” y en Lenin encontramos que “la política es economía concentrada”; todos estos movimientos parecen una partida de ajedrez (¿el “gran juego” del siglo XXI?) en la que las diversas potencias mueven sus peones militares al servicio de sus intereses económicos.
“La presencia de China en el continente africano sigue llenando las portadas de las principales revistas de negocios. Aunque la creciente importancia de China en innegable, los datos de inversión muestran claramente que Europa sigue siendo el principal inversor directo, no solo en términos de inversión acumulada, pero también de nueva inversión. Más concretamente, las compras de empresas africanas por empresas europeas han sido de similar tamaño, pero la inversión europea en nuevas empresas, conocida como «greenfield», es muy superior a la de China. En lo que China sobrepasa a Europa con creces es la financiación de proyectos de infraestructura en África, con cifras que más que triplican su inversión en dicho continente. En otras palabras, China está muy presente en el continente africano, pero más como un prestamista que como un inversor, con las consecuencias que eso tiene para la sostenibilidad de ese modelo. En otras palabras, los enormes proyectos de infraestructura en los que se han embarcado muchos de los países africanos están generando deuda que África tendrá que repagar un día”. (El País, 1 de agosto de 2019)
No olvidemos que en África se concentran grandes riquezas naturales, como coltán, petróleo, diamantes, oro, etc., además de ser un continente con una gran reserva de mano de obra barata. En cifras, los estados africanos tienen una deuda de 153.000 millones de dólares con China, que en los últimos 20 años ha concedido 1.143 préstamos a Gobiernos del continente, en una tendencia creciente.
Canarias, nueva base militar de la OTAN
Este es un buen motivo para que el gobierno español proponga a la OTAN “vigilar” su flanco Sur, en la lucha por la hegemonía mundial. Un giro que no augura nada bueno ni para el pueblo trabajador del Estado español, principalmente canario -mientras hay “un militar por cada 145 habitantes”, «en Canarias hay empleada por el Estado una psicóloga por cada 17.000 personas; una trabajadora social por cada 24.000 o una matrona por cada 100.000 residentes en las islas«, dice un informe Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE), dependiente del Ministerio de Defensa-, ni para los pueblos del continente africano que han sido saqueados, expoliados y masacrados desde hace siglos, primero con la esclavitud que sirvió de base para el desarrollo del capitalismo en los siglos XVIII y XIX, y después con el capitalismo imperialista.
La Cumbre de la OTAN de finales de junio se convierte, de esta manera, en una más que previsible «refundación» de la misma, según palabras de su propio Secretario General, desde que la burguesía alemana votó en connivencia con la socialdemocracia de ese país, desatar el “infierno en la tierra” que fue la I Guerra Mundial, y su continuación, la II Guerra.
Como la capacidad destructiva del sistema ha crecido exponencialmente desde mediados del siglo XX (armas nucleares), lo más probable es que no vayan a la guerra de manera directa; hasta los más “halcones” del Pentágono saben que sería “una guerra sin vencedores”. Sin embargo, lo que es previsible son guerras parciales, localizadas, de desgaste y roce continuo a través de ejércitos interpuestos, como los “contratistas” yanquis de Irak y Afganistán, o los mercenarios rusos enviados al Sahel tras la salida de los militares franceses de Mali.
Por ello, el bloque imperialista agrupado alrededor de la OTAN continúa construyendo diques al “desafío” ruso y chino, y quieren convertir a Canarias en el frente de contención en África Occidental, transformándola en una nueva base que se uniría a las que ya tiene en Rota y Morón.