No sólo nos matan el SIDA y las agresiones.
A muchas personas no les impactará saber que hoy en día el 50% de las nuevas infecciones de VIH se dan en hombres gais. (1) Es el leitmotiv que escuchamos desde los años ochenta y que hemos asumido: si eres gay, es probable que te contagies. A pesar de haber mejorado mucho en la detección y tratamiento de este virus, sigue siendo la principal preocupación de las políticas públicas para el colectivo LGTBI.
Pero no es sólo el SIDA lo que nos mata. Tampoco lo son las agresiones. Un buen ejemplo de esto es la predisposición más grande para sufrir osteoporosis, obesidad, cáncer de mama y de cérvix de las mujeres lesbianas y bisexuales, que se explica por un menor acceso a los servicios de detección del cáncer. (2) (3)
Así mismo, la juventud LGTBI tenemos dolencias específicas que nada tienen que ver con la morfología de nuestro cuerpo o cerebro, sino que son consecuencia directa de la estigmatización y violencia que sufrimos desde la escuela primaria. Los roles de género heteronormativos nos abocan a una propensión a la depresión y a la dependencia de sustancias como el alcohol y otras drogas. (1,4) Sufrimos unas tasas de suicidio muy elevadas, de entre dos y cinco veces más que el resto de jóvenes. En el Estado Español se suicidan 50 jóvenes LGTBI cada año, y 950 más lo intentan. (5) Lesbianas, gais y bisexuales tenemos el doble de posibilidades de sufrir una enfermedad mental que el resto de la población. (6) Las personas trans estamos especialmente expuestas a la discriminación, a la violencia interpersonal y al suicidio. Tanto es así que algunos estudios apuntan a que la mitad de las personas trans han pensado en quitarse la vida. (7)
Es indiscutible que los hombres gais son los que disfrutan de más visibilidad y aceptación dentro del colectivo. Aún así, tenemos ejemplos de países como Holanda en que los gais tienen hasta diez veces más posibilidades de autolesionarse que el resto de hombres, además de triplicarse las posibilidades de sufrir ansiedad y trastornos del estado de ánimo (8). Y esto en un país en el que el 90% de la población apoya las políticas por los derechos LGTBI y donde se aprobó por primera vez en el mundo el matrimonio igualitario.
Nuestra salud está en venta. 28J no es un día de fiesta sino de lucha y reivindicación
Como cada año, llega el 28 de junio y los comercios, las empresas e instituciones cuelgan nuestra bandera y nos dicen que es un día para celebrar cómo somos. Que ya hemos conseguido nuestros derechos, y que por lo tanto somos iguales al resto de personas cisgénero heterosexuales. Nos llaman a consumir en la gran fiesta del Pride. Empapelan los centros de nuestras ciudades gentrificadas con los cuerpos normativos de hombres y mujeres supuestamente homo. Esta mercantilización de nuestra imagen y nuestra opresión lleva a realidades como que el 42% de los trastornos alimentarios en hombres son en gais (9), y que además somos los más propensos al consumo de anabolizantes. (10) En pocas palabras, las empresas que participan del Pride, sólo lo hacen en su propio beneficio.
Además, en el actual sistema capitalista los niveles de opresión están afectados por la lógica de mercado. Un estudio comparativo de la relación económica y el «clima homofóbico» de 200 países concluye que un aumento en el 10% en el PIB de un país supone una reducción del 1% en el índice de homofobia. Una diferencia hacia la baja del 10% de gasto público se traduce en un 9% más de homofobia. Por último, un país con un 10% más en el índice de homofobia se traduce en la pérdida de 1,7 años de esperanza de vida en hombres gay (faltan datos para lesbianas, transexuales, bisexuales e intersexuales) (12).
Estas diferencias económicas entre los diferentes países y la opresión que sufrimos el colectivo también se reflejan en las desigualdades entre las clases sociales, también en los países imperialistas. Por ejemplo, en EEUU, el 40% de los jóvenes sin techo son LGTBI. (13) y el 29% de las personas reconocidas dentro del colectivo sufre hambre. En la Unión Europea, la tasa de paro entre personas LGTBI es del 15%. (14) Esta cifra aumenta hasta el 80% de paro para las personas trans españolas. (15) Tenemos un 40% menos de posibilidades de que nos llamen cuando dejamos un currículum (16). Los hombres gais cobran menos que los heterosexuales. (17) Las personas LGTBI estamos sobrerrepresentadas entre el 40% más pobre de la población. (18) Y los más perjudicados por esta realidad somos las personas LGTBI de clase trabajadora.
El supuesto avance legislativo no puede ocultar las necesidades aún insatisfechas de nuestro colectivo. La aprobación de la Ley trans que actualmente se debate en el seno del gobierno español es tan solo un paso más hacia la despatologización de nuestra identidad. Necesitamos depurar los tribunales de jueces machistas y LGTBI-fóbicos, formar a los docentes de escuelas e institutos en la sensibilización y acompañamiento del colectivo, impartir educación sexual obligatoria en las escuelas que respete todas las orientaciones sexuales e identidades de género para nuestros jóvenes. Tampoco hay investigación científica suficiente orientada a entender más profundamente el problema, por ejemplo, en el estado español no existe una recogida de datos estadística específica para el colectivo. Esto impide poder abordar la cuestión aplicando una política pública adaptada a nuestras necesidades.
Luchar por nuestras necesidades específicas no puede quedarse solo en exigir mejoras legislativas. La ley 11/2014 aprobada por el parlamento de Cataluña es una de las referentes a nivel estatal y europeo en cuanto a las sanciones contra la LGBTI-fobia, pero su aplicación ha sido insuficiente y no ha cambiado sustancialmente las condiciones de vida del colectivo. (11) Esto se debe a que cualquier ley, por muy avanzada que sea, si no tiene detrás recursos y garantías para llevarla a cabo, se quedará en papel mojado.
La precariedad, el paro, la impunidad ante las agresiones LGTBI-fóbicas, la falta de recursos de formación para combatir la opresión del colectivo tanto en centros de estudio como de trabajo, son las condiciones que nos llevan a ser uno de los sectores con mayores problemas de salud mental. La privatización de la sanidad pública, los recortes en educación, el aumento de las ratios en las aulas, la falta de recursos para ofrecer terapia psicológica desde la seguridad social gratuita y de calidad son aún más trabas para superar estas dificultades. Es por eso que la lucha por la defensa de lo público, y ahora con la crisis de la COVID-19 aún más, no es ajena para las LGBTI de clase trabajadora, sino que es central.
Los datos no mienten, la precariedad laboral pero también en salud, es una plaga dentro de los sectores oprimidos. Los niveles de opresión sí dependen de la clase social. El conjunto de trabajadores y trabajadoras nos hemos visto afectadas por el colapso del sistema sanitario público, mientras el Gobierno era incapaz de incautar a la privada, ofrecía ayudas millonarias a las empresas y no revertía los recortes en servicios públicos realizados a raíz de la crisis del 2008. Toda la clase trabajadora, y con mucha gravedad las LGTBI trabajadoras, nos hemos visto abandonadas en esta crisis. Nos une una misma lucha, que es el combate para exigir a los gobiernos que dejen de priorizar el beneficio privado frente a la salud de la mayoría de la población. Por eso este 27 y 28J salimos a luchar un año más, buscando la unidad de toda la clase trabajadora, porque si algo ha demostrado esta pandemia, es que la defensa de los servicios públicos es una lucha por defender la vida de tod@s l@s trabajador@s y clases populares, incluid@s l@s oprimid@s.
1. Gil-Borrelli CC, Velasco C, Iniesta C, de Beltrán P, Curto J, Latasa P. Hacia una salud pública con orgullo: equidad en la salud en las personas lesbianas, gais, bisexuales y trans en España. Gaceta Sanitaria [Internet]. 2017 May 1 [cited 2020 Jun 15];31(3):175–7. Available from: https://linkinghub.elsevier.com/retrieve/pii/S0213911116302497
2. Buchmueller T, Carpenter CS. Disparities in health insurance coverage, access, and outcomes for individuals in same-sex versus different-sex relationships, 2000-2007. American Journal of Public Health. 2010 Mar 1;100(3):489–95.
3. Liu RT, Mustanski B. Suicidal ideation and self-harm in lesbian, gay, bisexual, and transgender youth. American Journal of Preventive Medicine. 2012 Mar 1;42(3):221–8.
4. Hottes TS, Bogaert L, Rhodes AE, Brennan DJ, Gesink D. Lifetime prevalence of suicide attempts among sexual minority adults by study sampling strategies: A systematic review and meta-analysis. Vol. 106, American Journal of Public Health. American Public Health Association Inc.; 2016. p. e1–12.
5. Las alarmantes tasas de suicidio LGBTI en España: casi 50 jóvenes se quitan la vida cada año y 950 lo intentan | LA SEXTA TV – NOTICIAS [Internet]. [cited 2020 Jun 15]. Available from: https://www.lasexta.com/noticias/sociedad/alarmantes-tasas-suicidio-lgbti-espana-casi-jovenes-quitan-vida-cada-ano-950-intentan_2016091057d420120cf2d961f2d443fd.html
6. Semlyen J, King M, Varney J, Hagger-Johnson G. Sexual orientation and symptoms of common mental disorder or low wellbeing: Combined meta-analysis of 12 UK population health surveys. BMC Psychiatry [Internet]. 2016 Mar 24 [cited 2020 Jun 16];16(1):67. Available from: http://www.biomedcentral.com/1471-244X/16/67
7. Grossman AH, D’Augelli AR. Transgender Youth and Life-Threatening Behaviors. Suicide and Life-Threatening Behavior. 2007 Oct 1;37(5):527–37.
8. Aggarwal S, Gerrets R. Exploring a Dutch paradox: an ethnographic investigation of gay men’s mental health. Culture, Health and Sexuality. 2014 Feb;16(2):105–19.
9. Bulimia in the Gay Community [Internet]. [cited 2020 Jun 16]. Available from: https://www.eatingdisorderhope.com/information/bulimia/bulimia-in-the-gay-community
10. Mor Z, Parfionov K, Davidovitch N, Grotto I. Gym exercising patterns, lifestyle and high-risk sexual behaviour in men who have sex with men and in heterosexual men. BMJ Open. 2014;4(11).
11. La discriminació LGTBI continua «sortint gratis» a Catalunya [Internet]. [cited 2020 Jun 17]. Available from: https://www.elperiodico.cat/ca/societat/20191002/la-discriminacio-lgtbi-continua-sortint-gratis-malgrat-la-llei-catalana-del-2014-7662486
12. Badgett MVL, Waaldijk K, Rodgers Y van der M. The relationship between LGBT inclusion and economic development: Macro-level evidence. World Development. 2019 Aug 1;120:1–14.
13. Romero AP, Goldberg SK, Vasquez LA. LGBT PEOPLE AND HOUSING AFFORDABILITY, DISCRIMINATION, AND HOMELESSNESS. 2020.
14. – European Union Agency for Fundamental Rights F. EU LGBT survey – European Union lesbian, gay, bisexual and transgender survey – Main results. [cited 2020 Jun 16]; Available from: http://europa.eu
15. Más del 80 % de paro; la pesadilla de encontrar trabajo de las personas trans [Internet]. [cited 2020 Jun 16]. Available from: https://www.eldiario.es/sociedad/pesadilla-encontrar-trabajo-personas-trans_0_917608304.html
16. Tilcsik A. Pride and prejudice: Employment discrimination against openly gay men in the United States. American Journal of Sociology. 2011 Sep;117(2):586–626.
17. Drydakis N. Sexual orientation and labor market outcomes. [cited 2020 Jun 16]; Available from: http://evans.uw.edu/sites/default/files/public/EvansWorkingPaper-2011-08.pdf
18. LGBTI people are (likely) over represented in the bottom 40% [Internet]. [cited 2020 Jun 16]. Available from: https://blogs.worldbank.org/governance/lgbti-people-are-likely-over-represented-bottom-40