Daniel Ruiz, exdelegado petrolero de Comodoro Rivadavia y dirigente del PSTU, habló con Prosa Urgente desde el penal de Marcos Paz, donde se encuentra detenido hace más de 4 meses por manifestarse contra la reforma previsional en diciembre de 2.017. Denuncia que es un preso político del gobierno de Macri, aclara que el secretario General del Sindicato de Petroleros no lo apoya como corresponde y detalla cómo son los días en prisión.

Por Iván Marín

“Iba caminando por Pichincha, casi Independencia. Venía de una movilización de Astillero Río Santiago, que se hizo el 12 de septiembre. ATE había declarado paro nacional. Eran entre las dos y la tarde, y me detiene en un primer momento personal de civil diciéndome que me quede quieto y atrás llega personal de Policía Federal Argentina, donde me informan de que estaba incomunicado, me quitan celulares y todo”, relata Daniel Ruiz por primera vez a la prensa acerca del momento preciso en que lo detuvieron hace ya cuatro meses por ser parte de los miles que manifestaron en diciembre de 2.017 contra la reforma previsional en las afueras del Congreso de la Nación. “Me trasladaron por varias dependencias, entre ellas una antiterrorista que tienen en Buenos Aires, hasta que después fui a la alcaidía de Comodoro Py, y en la madrugada del 15 me traen a Marcos Paz”, amplía. Describe que pudo ver al “ver al abogado al día siguiente, porque estaba totalmente incomunicado”.

Martín Alderete, miembro Coordinadora Antirrepresiva por los Derechos del Pueblo (CADeP), es uno de los abogados que representa a Ruiz. En diálogo con Prosa Urgente detalló que el militante del PSTU (Partido Socialista de los Trabajadores Unificado) “fue procesado por los delitos de intimidación pública y atentado a la autoridad, que es la misma carátula a otros tres manifestantes. La causa en relación a él fue elevado a juicio”. Esos tres manifestantes a los que se refiere son César Arakaki y Dimas Ponce, militantes del Partido Obrero, quienes fueron detenidos y procesados junto a un trabajador de la Unión Obrera Metalúrgica por participar de la misma jornada de lucha que Ruiz.

Alderete destaca que la particularidad de la situación de su defendido es que “la calificación legal con la que va a juicio le permitiría aun en caso de condena tener una condena de suspenso, ya que no tiene antecedentes penales condenatorios y de acuerdo a sus características personales”. Por ello, señala, que “no hay ningún fundamento serio para mantenerlo privado de su libertad. Los mismos jueces dan por cierto de que no hay riesgo de que se fugue, de que entorpezca la investigación porque está terminada. Entonces, la verdad que es ilegal e injusto por donde se lo mire”.

Los últimos jueces que rechazaron la excarcelación de Ruiz, son los miembros del Tribunal Oral Federal N 3: Fernando Machado Pelloni, Andrés Basso y Javier Ríos. “Hay una decisión política de mantenerme detenido como un mensaje al conjunto de los trabajadores y de las luchas populares, sobre todo en los últimos días que han salido a manifestarse con el tema de las tarifas, el tema de los costos de vidas e incluso de los despidos que se siguen sumando a lo largo y ancho del país”, afirma el exdelegado petrolero.

Ruiz denuncia que “en mi caso figura en el expediente que me han intervenido todas mis comunicaciones, que han ido servicios de inteligencia a mi ciudad, a mi barrio y a hacer un seguimiento a toda mi familia, y aun así sigo estando detenido”. Sobre el particular, amplía Alderete: “Desde el punto jurídico no hay ninguna explicación para que esté detenido. No hay ninguna prueba ni se lo acusa de nada que implique la afectación de la integridad física de otra persona, la rotura de vidrios públicos. La única prueba que hay contra él es que está disparando un elemento pirotécnico hacia arriba, que no implica ningún riesgo. Todos están procesados y él es el único detenido. La explicación va desde lo político y tiene que ver evidentemente con que Sebastián Romero, que es miembro de la misma organización política (PSTU), está prófugo. Entonces, parece ser una especie de castigo que se lo mantiene detenido. De hecho, en algún momento el juez de Instrucción y este tribunal plantearon algo así que como hay un prófugo que es de la misma organización y con el que él podría haber tenido contacto, entonces tiene que mantenérselo detenido. El absurdo de esto es que si esta persona se mantiene 10 años prófuga, lo vas a mantener 10 años preso. En la práctica es mantener una persona detenida por fuera de los parámetros legales”.

Sebastián Romero es el joven estigmatizado por el gobierno y los medios de comunicación afines por el uso de un mortero en aquella histórica manifestación. A Ruiz también se lo acusa del uso de un “arma de fabricación casera, cuando es un elemento pirotécnico de venta libre (mortero) atado a una rama. En realidad, la acusación que se le hace parecería ser como una excusa para complicar su situación procesal y mantenerlo detenido, porque lo único que se le ve hacer a Daniel es algo que podría hacer cualquier persona en cualquier manifestación, que no implica ningún delito”, concluye el abogado.

Ruiz también denuncia que la Justicia no trabaja con la misma vehemencia que lo hace hacia su persona respecto de los policías que reprimieron en aquella jornada. “Queda demostrado que hay una clara persecución política y un mensaje al conjunto de los trabajadores. Ese es el hecho central por el cual estoy detenido, y por el cual la ministra de Seguridad Patricia Bullrich ha utilizado mi detención en varios medios diciendo un mensaje, ´aquel que salga a protestar contra las reformas o las políticas económicas, les va a pasar esto`. Ese es el trasfondo general. Por mi parte, y la de los trabajadores, confiamos mucho en la movilización a lo largo y ancho del país”.

¿Cómo han sido tus días en el penal?

Desde el momento que estoy detenido es cierto que uno extraña no solamente la familia, los amigos, los compañeros de trabajo, los compañeros de militancia. Pero yo en mi caso pienso en todas las luchas de la Patagonia, no solamente las últimas donde hemos tenido nuestros mártires como Rafael Nahuel, Santiago Maldonado, o Jones Huala que está extraditado, que hay que lograr que sea liberado. Ahora se van a cumplir 100 años de la huelga petrolera en abril, que fue bombardeada por la Marina de guerra en Comodoro Rivadavia. También están Víctor Choque, Teresa Rodríguez, los petroleros de Las Heras. Hay una serie de luchas en la Patagonia. Y es lo que me pone firme. Nosotros en Comodoro no tenemos acueducto todavía. Cada dos días se corta el agua. Pan American Energy gana 4 mil millones de dólares al año y no tenemos un hospital de alta complejidad, lo cual siempre terminan derivados a Buenos Aires. Hay mucho por qué pelear y eso es lo que me da fuerzas. Toda una reparación histórica por el saqueo de los recursos naturales que hemos sufrido, no solamente con el petróleo y la pesca sino también con el desastre que están haciendo con la minería en Santa Cruz y con lo que quieren hacer con la minería en Chubut. O sea quieren seguir dándoles todos nuestros recursos a las multinacionales, y esa es la pelea de nuestro pueblo. Como patagónico lo único que tengo que hacer es seguir resistiendo para avanzar.

Ruiz valora que se haya “logrado que organismos de derechos humanos me vengan a ver todos los viernes, y en ese espacio vienen diferentes organizaciones. Entonces, eso hace que no solamente la solidaridad sea efectiva sino también recibir información de diferentes sectores. Y hemos logrado que venga mi familia, que cuesta venir, porque son 2 mil kilómetros de distancia”.

¿El acompañamiento del sindicato existe?

Sí, pero muy formal. Se han hecho asambleas en diferentes empresas, colectas, pero no de la manera en que se tendría que hacer también. Es entendible que el gremio firmó una adenda con el gobierno y con las empresas, y esa adenda hoy no ha dado ningún resultado porque no es que se han garantizado los puestos de trabajo, aun así se siguen perdiendo. Y Vaca Muerta sigue siendo un lugar donde no han incrementado los puestos de trabajo, al contrario, hubo 5 muertos el año pasado producto de los accidentes. Y también hay contaminación. Al servicio de las multinacionales se está rifando la vida de los trabajadores y la contaminación afectando a todos los pueblos. Eso también condiciona de qué lado se pone la dirigencia gremial.

¿En el caso particular de Loma Avila (secretario General del Sindicato del Petróleo y Gas Privado del Chubut) se ha comunicado con vos?

No. Lo único que lo han hecho fueron otros miembros de comisión directiva sí, pero el secretario General no ha planteado nada, no ha dicho nada más allá de la formalidad.

¿Qué opinás de eso?

Justamente tiene que ver con lo firmado y los compromisos con el gobierno.

¿La adenda qué dice?

Es una flexibilización laboral donde se permite una serie de cosas. Por ahí es trabajar con un operario menos, el tema del viento, varias cuestiones que se ha peleado bastante tiempo. Y todos sabemos que hay cuadrillas que son mínimas para poder trabajar. Entonces, la adenda permite que se puede trabajar 4 o 5 horas con un operario menos, y eso es una sobrecarga para la gente que está trabajando.

¿Pero qué relación hay entre esa adenda y que no salgan a defenderte como corresponde?

Justamente, porque nosotros cuando salimos a reclamar lo de SP (empresa de servicios petroleros donde trabajó Ruiz hasta que quebró en 2.017), que cortamos los yacimientos, no aceptamos las nuevas condiciones que implementa el gobierno. Entonces, eso es un apoyo político hacia una postura que por lo menos una serie de compañeros tenemos con respecto a cómo enfrentar las políticas del gobierno. Entonces, creo que eso también condiciona el apoyo del gremio.

Porque uno lo primero que piensa es que si el sindicato realmente te quisiera defender tu situación sería otra porque ellos al parar ya la están tocando el bolsillo a las empresas y necesariamente el gobierno tendría que responder

Justamente, pero el gobierno está planteando más reforma laboral, previsional. Avanzar porque la reforma previsional se avanzó solamente una parte, ahora quieren avanzar con la edad jubilatoria. El apoyo explícito a mi libertad significa también un enfrentamiento directo a las políticas del gobierno, entonces eso es lo que está condicionado.

La lectura que hace Ruiz es clara: la conducción del sindicato no lo defiende como corresponde para no ir en contra de las políticas de ajuste del gobierno de Mauricio Macri. Una canallada por donde se lo mire.

¿Qué mensaje dejás al conjunto de la comunidad y sobre todo al pueblo chubutense?

Decirle que no olvidemos nuestro pasado, que somos descendientes de los pueblos originarios, que han luchado toda su vida. Nos han quitado casi todos los recursos naturales, y que tenemos que mirar hacia el futuro. No resignarnos. El plan económico del gobierno está al servicio del saqueo y el hambre y la miseria, y a nosotros lo único que nos queda es la unidad, salir a luchar y básicamente ir planteándonos alternativas económicas y medioambientales para poder salir adelante, aprendiendo de nuestros antepasados, de la cosmovisión de los pueblos originarios. También el tema de la estatización de las principales palancas de la economía, y no nos queda otra que seguir unidos y luchando. Y como patagónico levantar la bandera de más de 100 años de lucha en toda la Patagonia, y lograr que Jones Huala esté libre, que se haga justicia por Santiago Maldonado, por Rafael Nahuel, y que se absuelva a los trabajadores petroleros de Las Heras, y a partir de ahí mi libertad va a ser solo un recuerdo más porque los trabajadores en la calle van a plantear lo justo y necesario.

Fuente original: https://prosaurgente.blogspot.com/2019/01/daniel-ruiz-exdelegado-petrolero-de.html?fbclid=IwAR3FbYwp9-LErobOFYigMD1Xz4L7MoQ6Go6A-8w9pF75MLIAywe2wyLEBX8