En el día de ayer nos dejó nuestra compañera Isabel Pulido. En nombre de toda Corriente Roja queremos hacer llegar un fuerte abrazo a su familia, en especial a Antonio, Eli y Antonio en este momento de dolor, que es también nuestro.
Nacida en un barrio sevillano construido por los propios trabajadores que le dieron nombre, «Los Carteros», vecina del pueblo de Tocina, enclavado en la vega el Guadalquivir, Isabel ha sido una genuina hija de la clase trabajadora andaluza. Obrera desde los 13 años, tanto como jornalera en los campos, como operaria en almacenes y fábricas o como limpiadora.
No por casualidad Isabel ha sido en numerosas ocasiones el rostro público y la representante de Corriente Roja en actos, movilizaciones y varias elecciones. Mujer comprometida y reivindicativa, no podíamos encontrar una mejor personificación con la que mostrarnos.
En un mundo acostumbrado a la mentira y el pastiche en la política, a la sumisión de la mujer obrera del medio rural, Isabel con su naturalidad y rebeldía hacía vibrar a quien la escuchaba, daba ánimos y fuerza a quien tenía a su lado.
Quienes además hemos tenido la suerte de tratarla con cercanía, sabemos de su permanente alegría y su infinita capacidad para entregarse a los demás.