Los y las trabajadoras de la Plataforma Logística de LIDL Alcalá de Henares comenzaron una huelga indefinida el pasado 13 de febrero y al cierre de esta edición afrontan su tercera semana de huelga por salarios dignos, contratos de jornada completa para toda la plantilla y condiciones laborales dignas. La huelga, como su continuidad, ha sido decidida en asambleas. El Comité de Huelga está compuesto por los miembros del sindicato Co.Bas en el Comité de Empresa más el delegado de la sección sindical de Co.Bas.
Son cada vez más las personas, colectivos sociales y organizaciones políticas las que se han acercado a manifestar su solidaridad con la huelga. Co.bas asumió esta lucha como suya desde el primer momento. Desde distintos comités de empresa ha ido llegando el apoyo y un nutrido grupo de activistas del sindicato se encarga de arropar cotidianamente la huelga.
Un aspecto importante ha sido el contacto permanente con compañer@s de otras plataformas logísticas de LIDL como la de Nanclares de la Oca (Euskadi), que incluso vinieron a traer la solidaridad hasta Alcalá, o la de Narón (Galicia), quienes también están en huelga y a quienes desde aquí mandamos un caluroso saludo de ánimo.
Desde Corriente Roja hemos ido informando en las redes sociales y entrevistando a compañer@s de LIDL, l@s verdader@s protagonistas de esta lucha y con los que codo a codo aprendemos cada día. En este número especial de Página Roja, hemos querido dar la palabra a una parte de este grupo de activistas de Co.Bas que además son también militantes de Corriente Roja.
Andrea Zayas: “Vuestra precariedad son nuestros beneficios”
Este conflicto viene de lejos, de mucho malestar acumulado por salarios de miseria, contratos a tiempo parcial o el trato indigno a muchos/as trabajadores/as. El año pasado se firmó el convenio estatal de LIDL y frente a la falta de información y consulta a los trabajadores/as, los y las compañeras de co.bas impulsaron asambleas. En ellas quedó más que patente el rechazo de los trabajadores/as de la Plataforma Logística de LIDL Alcalá a un convenio absolutamente insuficiente, a seguir aguantando tener que «mendigar» horas complementarias, trabajar festivos o en muchos casos pluriemplearse para poder huir de la miseria salarial a la que les tiene abocados LIDL.
La empresa en un alarde de desfachatez acuñó una frase que es toda una provocación: «Vuestra precariedad son nuestros beneficios». LIDL siempre había propagado la falsa idea de que de ninguna manera se podría mejorar el convenio estatal. Hasta que entraron en escena los y las trabajadoras de LIDL Nanclares de la Oca (antiguos trabajadores/as de LIDL Llodio) que venían con un convenio propio mucho mejor que el estatal y ganado en años de lucha.
La dirección de LIDL y los dirigentes de CCOO y UGT hicieron de nuevo piña contra estos compañeros/as, pretendiendo negarles un acuerdo propio que preservara sus mejoras conquistadas. Fueron a la huelga a finales del pasado año y consiguieron mantener sus mejoras respecto al convenio estatal que se resumen en 6.000 € brutos más al año para un salario de mozo/a a 40 horas, 6 o 7 días de libre disposición más al año (dependiendo de la antigüedad) y 59 horas menos de jornada anual.
Los y las trabajadoras de LIDL Alcalá de Henares decidieron mayoritariamente en asambleas ir a la huelga indefinida por la equiparación salarial y de condiciones con LIDL Nanclares de la Oca y por contratos de jornada completa para toda la plantilla. Exigen algo elemental: a igual trabajo, igual salario e iguales condiciones.
Ángel Luis Parras: esta huelga muestra la diferencia entre el país oficial y el real
Cuando la ministra Yolanda Díaz y todo el gobierno tiraban al cesto de las promesas incumplidas su compromiso de derogación de la Reforma Laboral de Rajoy y decía que la nueva Reforma Laboral que pactaron con la patronal y CCOO-UGT abría un “nuevo paradigma” en las relaciones laborales, que era la más “progresista”; o cuando en estos días el gobierno y la burocracia sindical presumen de una nueva subida del Salario Mínimo Interprofesional, al tiempo que banqueros y grandes multinacionales se vanaglorian de sus beneficios multimillonarios, esta huelga muestra que venden humo, que la grieta entre el país oficial y el real se abre más a cada paso y huelgas como ésta no son más que la expresión del descontento social, en especial de los sectores obreros más precarizados.
Los contratos a tiempo parcial que crecen como las setas, la ETTs, los fijos discontinuos… lo único fijo que garantizan es la pobreza.
Cuando l@s trabajador@s de LIDL salen a manifestarse a las calles y explican su lucha, son muchas las simpatías que recogen de l@s vecin@s, porque esta lucha habla de cosas muy sencillas: no se puede mantener a una familia con los 900€ al mes que puedes ganar con un contrato de 30 o 32 horas; no se paga un alquiler o una hipoteca, se come, se viste, se tiene un mínimo de ocio, ni con los 1.080 del SMI, ni con los 1.100 que much@s trabajador@s de 40 hs pueden ganar con pagas prorrateadas incluidas.
Las grandes cadenas de supermercados como Mercadona, Carrefour o LIDL ganaron fortunas con la pandemia y siguen ganando fortunas con la subida de precios en medio de la inflación y pagando salarios de miseria. Y cuando l@s trabajador@s salen a luchar no tienen el menor reparo en pasarse la Ley por alto y vulnerar el derecho a la huelga (contratando ETTs para sustituir a los huelguistas; poniendo a los jefes intermedios a hacer de mozos; trasladando departamentos enteros a hacer el trabajo de l@s huelguistas…), además de utilizar las Fuerzas antidisturbios como verdaderos piquetes patronales. Por eso huelgas como la de l@s trabajador@s de LIDL tienen que ser apoyadas con todo el tesón y el alma, porque muestran que para la clase obrera no hay otro camino que la lucha, porque los gobiernos se digan progresistas, de izquierdas, de derechas o de “centro”, son gobiernos patronales, gobiernos burgueses y como tantas veces gritamos en la manifestaciones, “no hay otra manera, o con la patronal
Antonio Rodríguez: CC.OO y UGT están con la patronal
Esto es lo más lamentable. Las direcciones de CCOO y UGT comenzaron a mostrar su carácter propatronal tratando de boicotear las asambleas de trabajadores/as en las que se decidió ir a la huelga indefinida. Hoy se han convertido en los campeones del esquirolaje, llevando a cabo una campaña feroz contra la huelga. Hace tiempo que CCOO y UGT se integraron plenamente en las estructuras del Estado, comenzaron a depender de las subvenciones y asumieron su papel de rompehuelgas y conciliadores sociales al servicio de la patronal. Esto no significa que no vayamos a encontrar trabajadores honest@s y combativ@s en la base de ambos sindicatos. Lo que quiere decir es que las direcciones de CCOO y UGT son uno de los enemigos a batir en cada nueva lucha, ya que lamentablemente se han convertido en los agentes de la patronal en el seno de la clase obrera y esto se vive con total crudeza en la lucha diaria.
Jesús Delgado: El sindicato es para luchar
En un primer momento, los miembros de co.bas en el Comité de Empresa propusieron a CCOO y UGT organizar la lucha de manera conjunta porque entendían que la equiparación de condiciones con Nanclares de la Oca era un asunto que involucraba a toda la plantilla, más allá de la afiliación de cada trabajador/a.
Tristemente CCOO y UGT se posicionaron junto a la empresa desde entonces y co.bas ha sido el único sindicato en la trinchera de l@s trabajador@s. El Comité de Huelga y l@s activistas del sindicato hemos tratado de fortalecer la huelga guiándonos por unos principios elementales. Consideramos esencial el papel de la asamblea de trabajador@s en la toma de las decisiones de la huelga. La asamblea es soberana y no se da un paso sin su consentimiento. También nos parece un elemento crucial la cuestión de la independencia de clase, que tiene su raíz en la independencia económica. co.bas es un sindicato que vive exclusivamente de las cuotas de sus afiliad@s.
En el sentido de fortalecer la lucha, co. bas propuso la creación de una Caja de Resistencia, construida en base a la solidaridad obrera, con el objetivo de apoyar económicamente a l@s compañer@s con más dificultades. Son muchas las aportaciones que están llegando y todas ellas tienen un enorme valor.
José León: En LIDL, la juventud obrera se abre paso
Quienes ya tenemos unos años y seguimos al pie del cañón le damos un enorme valor a ver trabajadores y trabajadoras jóvenes protagonizando luchas como esta de LIDL. Ellos y ellas son el futuro. Hay una parte inevitable de falta de experiencia; son décadas de «paz social» que la patronal y la burocracia sindical han impuesto y l@s trabajador@s cuando salen a luchar tienen que pagar el peaje de la vida, el aprender y equivocarse a veces. Sin embargo, lo están haciendo muy bien y mientras mantengan la fe en la lucha y las cosas se decidan de manera colectiva en asamblea más posibilidades de no equivocarse y más garantías de victoria. L@s más veteran@s estamos aquí para eso, arrimando el hombro y ayudando también con la experiencia acumulada.
Enrique Pirobe: Hay que sacar el conflicto a la calle
León y yo somos los jubilados de todo este equipo de apoyo de Co.Bas y de Corriente Roja. Pero somos jubilados del trabajo, no de la lucha. Yo además de coincidir en todo lo que dice León, quería añadir dos cosas. Una, que me ha impresionado mucho la composición de l@s trabajador@s de LIDL. En las manifestaciones nosotr@s gritamos eso de «nativa o extranjera, la misma clase obrera». Viendo esta huelga ese grito se hace más verdad que nunca. Aquí hay trabajadores subsaharianos, magrebíes, latinos, del Este de Europa, español@s… es la clase obrera tal cual, los que de verdad, hayan nacido donde hayan nacido, construyen el país. Es emocionante verl@s junt@s en las asambleas, en los piquetes, en las manifestaciones.
Lo otro que quería señalar es que sacar el conflicto a la calle, organizar, como se ha empezado a hacer en estos días, las concentraciones ante las puertas de los supermercados de LIDL para que nos vean l@s trabajador@s de las tiendas, para que la gente que va a comprar se entere, es fundamental porque además estas multinacionales invierten mucho dinero en imagen y hay que demostrar lo que realmente son; darles donde más les duele
Olivia Blanco: Nuestra razón de ser es la lucha porque un día sean los propios trabajadores y trabajadoras quienes gobiernen
Ser parte de las luchas obreras es para l@s militantes de Corriente Roja una obligación y una escuela en la que aprender. Los partidos políticos se han convertido en aparatos electorales que medran en los parlamentos y las instituciones de Estado y que nadan en muchos casos en el mar de la corrupción. No se puede decir que todos sean iguales, pero sí que son complementarios y en nada opuestos. Esto ha generado en millones de trabajador@s un profundo desapego de la política y que se normalice el decir eso de ir a votar «con la nariz tapada». El problema de fondo es que esos partidos o son defensores abiertos del sistema capitalista o medran en él de manera resignada mientras se ofrecen como gestores desde los gobiernos de turno como el actual.
Nosotr@s opinamos que partiendo de la lucha por lo más inmediato como el trabajo, el salario, los derechos democráticos (como el de huelga, que cada día se recortan más), hay que ir al problema de raíz que es la lucha por acabar con el sistema capitalista mismo. Porque no hay pan, trabajo, vivienda, educación o sanidad pública y de calidad sin enfrentar a estos buitres. Es imposible una solución a la miseria de la clase obrera dentro de este sistema de producción social. Es por eso que Corriente Roja somos una modesta organización obrera, un partido cuya razón de ser es crear la conciencia obrera y revolucionaria para organizarnos, echar abajo el sistema capitalista e imponer el único gobierno que nunca tuvimos: Un gobierno de l@s trabajador@s.