El patriótico Gobierno del PP envió el Plan Presupuestario para 2018 a Bruselas. Y como siempre aplicó la norma de reducir, por tercer año consecutivo, en educación, sanidad y gastos sociales. ´
¿No era que había recuperación económica? Pues ahí está, la partida destinada a Educación pasa del 4% al 3,8% del Producto Interior Bruto (PIB), la de Sanidad del 6% al 5,8% y para pensiones, servicios sociales y políticas de fomento de empleo, entre otros aspectos, se reduce del 16,5% al 16,2%.
Pero no todo son recortes, por ejemplo el Ministerio de Defensa alcanzará el 1% del PIB, que significa más de 12.000 millones de euros. Un aumento que deberá seguir creciendo tal como se comprometió ante el máximo responsable del Pentágono, James Mattis, el pasado mes de marzo en su visita a los EEUU la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal. Eso forma parte del plan acordado en la OTAN de duplicar los gastos militares en los próximos siete años.
El plan presupuestario contempla también una partida de más de 2.000 millones de euros para rescatar las autopistas de peaje quebradas. Y, como siempre, tras la reversión al Estado y el saneamiento contable, el Gobierno prevé ofrecer a las constructoras las autopistas en concesiones por otros 25 años.
Así pues llama la atención que en plena “recuperación económica” las partidas sociales continúan su declive y alcanzan mínimos históricos. Y llama la atención ver a tan patriótico y español gobierno cómo muestra una generosidad sin límites hacia los banqueros, constructoras, cúpula militar o ricos y una cicatería vergonzosa cuando se trata de los trabajadores/as y estudiantes, es decir los “compatriotas” más pobres.
Llama la atención que la fortaleza de su patriotismo español cuando se trata de arremeter contra Cataluña, contraste con su absoluta sumisión a la OTAN o a la UE a la hora de defender “los intereses nacionales”
Quienes han sostenido al Gobierno de los recortes en tan patriótica cruzada son responsables de la que se nos viene, por enésima vez, encima. Pero no vale resignarse, la clase obrera, los estudiantes, los pensionistas, tenemos que recuperar la iniciativa y la calle.
PREPARAR UNA JORNADA ESTATAL DE LUCHA
Sobran razones para que los trabajadores/as retomemos la iniciativa, unificando las luchas obreras, de estudiantes, mujeres, pensionistas… Echar abajo los presupuestos de los recortes y el rescate de los especuladores y que con ellos se vayan Rajoy y todos los corruptos.
No podemos cejar en la lucha que puso en pie las Marchas de la dignidad. Y visto lo ocurrido con Cataluña, la infamia del nacionalismo burgués español dirigido por Rajoy y el Rey, y la cobardía y traición de la burguesía catalana con Puigdemont al frente, se corrobora que solo la clase obrera puede poner orden y garantizar el Pan, trabajo, techo e igualdad… y derecho a decidir.
Pero además de razones y necesidad hay cambios que hacen posible dar los pasos para que la clase obrera se ponga al frente. En los últimos meses el número de huelgas obreras fue aumentando revirtiendo la tendencia de los dos últimos años. Los niveles de huelgas en el segundo trimestre de 2017 supusieron un 33,2% más que los datos del mismo trimestre del 2016. Y son ya nueve meses con un crecimiento ininterrumpido de las huelgas. Aunque en forma desigual, es Euskal Herria, el norte y Galicia los que mayor conflictividad reflejan. La propia CEOE reconoce este hecho cuando señala que, en lo que va de año (hasta agosto), son ya 6,3 millones de horas laborales las que se han perdido por las huelgas. Esto supone un repunte del 68% frente al 2016.
Hoy están en pie huelgas como la de los/as trabajadores/as de Metro de Valencia, de la Sanidad Privada de Madrid, Titanlux…, o conflictos abiertos por los convenios como el de los/as trabajadores/as de mantenimiento de los trenes de Alstom, o las líneas periféricas del transporte en Madrid.
Son además notables las luchas sociales como las recientes movilizaciones de mujeres que salieron a la calle contra la justicia machista y patriarcal que pone en tela de juicio a las víctimas de la violencia machista. Y se anuncian nuevas movilizaciones de los/as pensionistas y estudiantes.
En las próximas semanas están previstas reuniones de las Marchas de la Dignidad, hay que preparar territorio a territorio, junto a los trabajadores/as de empresas y/o sectores en lucha, movimientos sociales, organizaciones feministas, pensionistas, estudiantes, las condiciones para convocar una jornada estatal de lucha. Organizar esa jornada debe ser la tarea común a todo el movimiento.
