Las declaraciones de la Alcaldesa el pasado mes de agosto señalando que “Madrid esta muy sucio” y que “O las empresas cambian de actitud o habrá que buscar alguna manera de ira a una actuación contractual que nos permita limpiar al propio Ayuntamiento”. Preguntada si esa opción pasaba por remunicipalizar la respuesta fue “Si, es un objetivo que no podemos renunciar a ello”.
Esas declaraciones han sido tomadas como una amenaza a las empresas y han suscitado, como siempre, el jaleo mediático de la derecha, y desgraciadamente también los reparos, dudas y oposición vergonzante, con declaraciones a medias de los dirigentes de CCOO y UGT.
Las empresas con toda la desfachatez dicen no poder cubrir el servicio porque tienen un ERTE que reduce las plantillas. Como si el ERTE hubiera caído del cielo, como si los 4.000 puestos de trabajo perdidos en los últimos años se hubieran evaporado por ciencia infusa.
Los barrios, en especial los barrios obreros, siguen estando hechos una porquería y las ramas se siguen cayendo y matando o hiriendo a los transmutes. Faltan trabajadores en las plantillas y el ERTE lo están pagando los trabajadores/as de sus ya raquíticos salarios.
Exigir la retirada inmediata del ERTE y la remunicipalización del servicio no es una opción, es una necesidad imperiosa. Es lo que hemos reclamando los trabajadores y muchos vecinos desde la calle, es el compromiso electoral de Ahora Madrid, es lo que han solicitado por escrito al Ayuntamiento trabajadores y delegados de diversos sindicatos de la limpieza viaria y jardinería. No cabe por tanto más dilación.
El Ayuntamiento debe pasar de las “amenazas” a los hechos, porque aquí cada día cuenta, para la salubridad de los barrios, para la seguridad de los viandantes, para las condiciones de trabajo y los salarios de los barrenderos y jardineros.
Lo que no es de recibo, ni racional, ni democrático, es que las empresas sigan haciendo del Ayuntamiento su patio de los negocios. Eso no es cambio alguno, es lo de siempre.
Lo que no es aceptable es que se de por “legal” e “inamovible” que una alcaldesa en funciones o un equipo de gobierno municipal cuando tienen los días contados para terminar su mandato, firmen contratos por 10 años, como hizo la “ilustre” Botella.
Lo que no se puede tolerar es que las empresas que despiden y aplican ERTEs, aleguen “falta de personal” porque eso es el colmo de la caradura.
El Ayuntamiento debe pasar a remunicipalizar sin mas demora, porque eso es defender el derecho de los barrios a la limpieza, es defender no seguir contribuyendo al deterioro del medio ambiente dejando que los árboles se mueran y además matando o hiriendo gente cuando se caen la ramas; es defender a los barrenderos y jardineros que ven mermar sus salarios yendo 45 días por año al paro en virtud del ERTE. Y lo no menos decisivo, es dar un servicio público a los vecinos de Madrid de más calidad y por menos dinero.
Finalmente hay que recordar que los trabajadores de la limpieza viaria y la jardinería no son los únicos que sufren estas condiciones de ERTEs, perdida de salarios y derechos y ven como los servicios que prestan se han ido deteriorando a pasos agigantados porque son las mismas empresas constructoras, entre otras, las que han hecho de los servicios público que prestan una fuente de sus suculentos negocios. Las limpiadoras de los colegios y edificios públicos, la de los centros de salud, las de atención domiciliaria (que eran municipales) deben ser municipalizadas. El cambio que queremos, el que nos llevó a muchos trabajadores a votar por Ahora Madrid, se tiene que expresar en poner fin a la fiesta que llevan haciéndose años con los servicios públicos las constructoras y las empresa privadas, a costa de los trabajadores y el pueblo.
Por el sindicato de Comisiones de Base (COBAS)
Gaspar Torres, Coordinador del Area de Servicios públicos
31/Agosto/2015