El pueblo trabajador griego derrota en las elecciones a la burguesía griega y la UE, poniendo en el gobierno a una organización que promete no aplicar las medidas de austericidio de Nueva Democracia y el PASOK.
Tras docenas de huelgas generales, de duros enfrentamientos con las fuerzas policiales y entre las mismas fuerzas de la izquierda griega (quien no recuerda al KKE protegiendo el parlamento del intento de asalto de miles de manifestantes comandados por el anarquismo griego), la población, a falta de otra alternativa, escoge la via electoral, y confía en Syriza la aplicación de las políticas que respondan a los intereses de la burguesía griega y europea.
Frente a la caida a plomo de los partidos «naturales» de la burguesía, ND y el PSOK, y sin atreverse todavía a sacar la bestia fascista a la calle, aunque que la amenaza esta ahí siempre (Aurora Dorada), la burguesía griega y europea admite la victoria democrática de Syriza. El KKE saca, no lo olvidemos, 15 diputados, de los que nadie habla.
Cuando llega la hora de formar gobierno, Syriza, en vez de escoger su aliado natural, el KKE, y formar un gobierno que responda a la mayoria de la clase trabajadora y el pueblo, pacta con un partido burgués, fuertemente derechista, le entrega el ministerio de defensa en un país que es llave en la zona (Grecia es el Oriente Proximo de la Europa, es el puente entre Oriente Proximo y Europa).
Estaba claro que Syriza no quería romper con la burguesía griega,… y cómo todo reformista perdió de vista donde está la burguesía griega. El Anel es el fantasma de la burguesía griega, mientras que lo fundamental está con Europa, con la ND y en menor medida con el PASOK.
Como la burguesía (la personalización del capita) ve a Syriza como un «advenedizo», que quiere romper con las políticas económicas que les dieron beneficios el largo de los años, y además, es fruto de un triunfo popular -con lo que tiene esto de reforzar la conciencia de que es posible otra política-, no les de la ni un segundo de respiro: comienzan las campañas contra Varoufakis y tonterías por el estilo.
Pero, cómo hace una burguesía para derrotar su enemigo, ahogarlo con lo unico que tiene en su mano, el dinero. Comienza la fuga de capitales, como hicieron en Chile, con la Unidad Popular, en Portugal de la Revolución de los claveles, en la Nicaragua del Sandinismo,… como hacen siempre: abocar a la ruina el país, para que las clases medias y la pequeña burguesía rompan con el gobierno de unidad popular, y pidan una vuelta «al orden» del pasado; ya sea con un golpe militar (Chile), ya con un golpe pacifico, via electoral (Portugal), ya umha combinación de los dos (Nicaragua).
Si en Chile y en Nicaragua fue desde los EE UU donde se promocionó la contrarrevolución, en el caso Portugués se unieron yanquis y europeos, españoles (estos con una dictadura en crisis no podían admitir una revolución triunfante en sus fronteras). En el caso griego, la vanguardia de la reacción es Bruselas/Berlin qué acude en apoyo de la burguesia griega. Esta, mientras, cierra los bancos, impone el corralito y huye con el dinero a Suiza (80 mil millons de euros, la cantidad que Syriza pide a la UE), dejando el país al borde de la ruina.
La respuesta de Syriza es la de anular toda la movilización social, que es su UNICA fuerza; todo el mundo reconoce que en los 6 meses de negociaciones la mobilización social había caído totalmente, y fiarse en unas negociaciones sin tener nada detrás, confiando en la «inteligencia» de los negociadores Varoufakis y Tsipras.
Syriza no podia hacer más, dicen casi todos los que en su momento criticaron al PCE cuando decia que en el 78 era imposible hacer más, porque no confió en las fuerzas del pueblo trabajador griego… Syriza no podia hacer más porque quedó atado a los métodos de la burguesía, la negociación en conciliábulos, atado a ella a través del su fantasma, Anel, y porque había renunciado ideologicamente lo que siempre definió la izquierda, la lucha de clases.
El mismo Varoufakis lo recoñece cuando dicen que le reconocian que «tenían razón, pero que iban a destruirlos». ¿Porque destruirlos?, porque Syriza, y el referéndum posterior, eran fruto de la decisión democrática del pueblo, y el capitalismo es lo contrario a la democracia popular por el vertice. La única democracia que reconoce es la de los consejos de administración, nada más.
Podía hacer Syriza otra cosa; SÍ. Quien diga el contrario sólo quiere justificar la traición, como cuando el PCE decia no podemos hacer más: no sabemos lo que hubiera pasado si en el 78 triunaran las tesis de los que defendíamos que se podia hacer más, pero lo que es cierto es que los que decian «esperad, ya vendrán mejores tiempos», fracasaron. Que estamos como estamos, lo demuestra.
Syriza, en vez de pactar con el fantasma de la burguesía griega, podía haber llegado a un acuerdo de Gobierno con el KKE, haberse apoyado en las organizaciones obreras de la izquierda griega, en las organizaciones sociales… Haber acompañado las negociaciones -nadie niega la necesidad, en ocasiones, de negociar- con la gente trabajadora en la calle, no desmobilizarla. Haber organizado a la población preparandola diciendole lo que era inevitable, o tragaban con las imposiciones de la burguesía griega y la UE, o tenían que romper con ellos, salirse de la UE y del Euro, y adoptar un camino nuevo. No, Syriza hizo todo el contrario, siempre llamó a confiar en la negociación… con los que estaban ahogando Grecia. Estaba engañando el pueblo, diciendole que había confiado en el que era imposible, que la UE y la burguesía griega cambiarían sus políticas.
Mientras la burguesía griega y europea ahogaban Grecia para imponer sus planes, el gobierno no adoptó ninguna medida de defensa frente al ahogo como la nacionalización de las empresas y de la banca, como la expropiación de los capitales en fuga, como el establecimiento de una moneda / pagarés (cómo proponía Varoufakis) para ir saliendo de la situación. E incluso, desde la independencia de una politica cara el socialismo, procurar un empréstito con el banco de los BRICS que le habría permitido liquidez: utilizar las contradicciones interimperialistas para ganar tiempo no es ningún pecado.
Si alguen piensa que sin romper esta UE y con la burguesía actual, en las condiciones de crisis social y política del capitalismo, es posible evitar el desmantelamiento de las conquistas sociales llamadas «estado del bienestar» y hacer otras políticas está engañando a la población.
Algunos dicen: esperemos a España, … Pero, para qué? Podemos, Ahora Común, Mareas, etc… no tienen como objetivo romper con la UE ni abrir un proceso constituyente que Rompa con el Regimen de la Transición, si no que se mueven en la perspectiva pequeño burguesa de que «cualquier tiempo pasado fue mejor» o dicho de otra manera, una vuelta a la «placidez» del Estado del Bienestar.
Grecia demuestra que las burguesias europeas ni quieren ni pueden hacer otra cosa que lo que están haciendo, la crisis es tan grave, tiene un calado de tal calibre que sólo pueden recuperar sus beneficios destruyendo hasta la raiz las conquistas que quedan.
Grecia tambien demuestra que los objetivos políticos de la clase trabajadora y el pueblo sólo se pueden conquistar partiendo del reconocimiento abierto y claro de que «es la lucha de clases, estúpidos», y de su movilización independiente de las organizaciones burguesas.
En Grecia, como en el Estado Español y en la UE, la lucha está entre las burguesias (personalización del capital) unidas estratégicamente tras ese engendro que es la UE, y la clase trabajadora y los pueblos, todos, desde lo alemán hasta el griego, desde el portugués hasta el polaco. Y que no caben, ya, políticas socialdemocratas.
Muchos comparan el humillante acuerdo Syriza/UE con el Tratado de Versalles, yo prefiero compararlo con la votación del 4 de agosto de 1914, cuando la socialdemocracia alemana votó los presupuestos de guerra, declarando el mundo a sua bancarrota.
La votación del parlamento griego es la bancarrota de las politicas socialdemocratas actuales.
18 de julio de 2015