La pasada semana se ha llevado a cabo el juicio por el caso de una violación múltiple a una joven de 18 años (en febrero de 2019), más conocido como “la Manada de Sabadell”.
Tuvieron que pasar dos años para que el Tribunal, finalmente, dicte una sentencia: 31 años de prisión, solamente a uno de los tres violadores (materiales) y a otros dos, con 13 años de prisión por complicidad. Los otros dos hombres, que también violaron a la joven, autores materiales de dicha aberración, uno se ha fugado y al otro no lo pudieron identificar.
Corriente Roja queremos expresar todo nuestro apoyo a la víctima y exigimos la condena a todos los violadores. Nuestra máxima indignación y repudio por el manejo mediático y judicial que se ha hecho de este caso. Una vez más, somos testigos de que convivimos con un régimen que perpetúa y ampara un sistema judicial sumamente machista, que es reproducido por los medios de comunicación sin ningún tipo de cuidado hacia la víctima, dejándola totalmente expuesta, divulgando su identidad, información personal y hasta su orientación sexual; viéndose obligada a revivir crudamente cada detalle de ese infierno en una exposición abierta y pública.
No podemos aceptar juicios que lleguen dos años más tarde de los hechos, mientras tanto, los acusados se encuentran en libertad condicional posibilitándoles la fuga, como lo ha hecho uno de ellos; o seguir paseando por las calles de la ciudad. El resultado, una sentencia que llega tarde y es insuficiente.
Después de estos sucesos, que son lamentablemente reiterados, no es extraño que solo un 20% de las mujeres violadas denuncien a sus agresores.
Por eso decimos ¡Basta! Expresando todo nuestro apoyo a la joven.
¡Porque no estás sola! ¡Porque es urgente la depuración de este sistema judicial!
¡Porque necesitamos que las mujeres víctimas de violencia machista sigan denunciando a sus agresores!
Porque necesitamos políticas reales, con presupuestos del Estado para recursos y protocolos de atención y protección a las víctimas.
Porque para eso sabemos que, solo la movilización, la organización y la lucha en las calles es capaz de tirar abajo este régimen burgués y corrupto, heredero del franquismo, en el cual este sistema judicial injusto y machista, vive y se regocija.
¡Porque estamos hartas, porque no queremos ni un violador más en las calles!