A menos de un mes de las elecciones municipales, Bolsonaro, el Congreso y los actuales gobernadores, alcaldes y concejales conspiran para, al día siguiente de las elecciones, despellejar aún más a los de abajo para asegurar las ganancias de un puñado de capitalistas multimillonarios. Basta decir que, junto con el desempleo, la crisis salarial, el hambre, los más de 155.000 muertos por COVID-19, el gobierno recortó los pírricos 600 reales de ayuda de emergencia a 300 reales y anunció su fin para diciembre, condenando a millones al hambre.
El senador atrapado con R$ 30.000 en la ropa interior es tan solo unos de los tantos ladrones de este gobierno y este Congreso, que vota para dar miles de millones a los banqueros y exonerar a las multinacionales, a los terratenientes, a las grandes empresas, y que hace las leyes para que los multimillonarios no paguen impuestos. Son los mismos que votan por acabar con las pensiones y los derechos laborales.
Aguas abajo, son innumerables las movilizaciones y huelgas contra los despidos, privatizaciones y pérdidas de derechos. Los maestros, con el apoyo de los padres y la comunidad, resisten contra la expansión del genocidio con el regreso a las aulas. Indígenas, campesinos pobres y quilombolas luchan contra el tiempo y en defensa del medio ambiente. Los jóvenes pobres y negros de la periferia resisten la violencia policial.
Necesitamos hacer avanzar la unificación de las luchas y la defensa de que sean los ricos quienes paguen la crisis. Hay que quitarles dinero a los ricos para evitar el hambre, generar empleo y garantizar salarios. Necesitamos un proyecto de los trabajadores. Necesitamos construir una alternativa socialista y revolucionaria.
El voto útil está en el PSTU
En estas elecciones, el PSTU se presenta defendiendo la necesidad de construir una alternativa revolucionaria y socialista para nuestras ciudades y nuestro país.
Queremos votos que fortalezcan la lucha por los objetivos históricos e inmediatos de la clase trabajadora. Les decimos a los trabajadores que necesitamos transformar las ciudades, pero también los Estados y todo el Brasil. Necesitamos sacar a Bolsonaro y Mourão para impedir que sigamos pagando la factura de esta crisis.
Además de sacar al gobierno, es necesario acabar con el control que los bancos, las multinacionales, las grandes empresas nacionales y los agronegocios tienen sobre nuestro país. Brasil es un país muy rico, pero los trabajadores y la gran mayoría del pueblo son pobres, porque un puñado de multimillonarios se apodera de todos los recursos y riquezas que produce el pueblo.
Sin embargo, sin acabar con la explotación capitalista y el dominio de los monopolios internacionales, no hay forma de solucionar los problemas de empleo, salarios, derechos, jubilación, vivienda, salud, educación, tierra, medio ambiente y crédito a las pequeñas empresas y a pequeños productores.
Debemos cambiar completamente nuestro país, acabar con el sistema capitalista y construir un nuevo tipo de sociedad, la socialista. Esto solo será posible si construimos un gobierno socialista de los trabajadores y los pobres que funcione a través de los consejos populares.
Por eso criticamos alternativas como el PT, el PCdoB o el PSOL, los cuales proponen gobernar la sociedad capitalista junto a los banqueros y los grandes empresarios.
Para cambiar de verdad nuestra realidad, necesitamos una revolución socialista que ponga a los trabajadores y a los pobres en el poder. Sin embargo, podemos y debemos utilizar las elecciones para votar y elegir candidatos socialistas y revolucionarios; para ocupar espacios en las trincheras del enemigo y ayudar a nuestra movilización, nuestra lucha y nuestra organización.
Un mandato revolucionario y socialista necesita usar el parlamento, los municipios o cualquier institución burguesa como un punto de apoyo secundario para ayudar a sostener la lucha, la conciencia y la organización de nuestra clase.
En la historia del movimiento obrero mundial ya ha habido parlamentarios revolucionarios que, muy a diferencia del PT, PCdoB o PSOL, hicieron de sus mandatos un valioso punto de apoyo para la lucha contra el sistema capitalista. Una caja de resonancia de denuncia del sistema, de los fraudes de la burguesía y sus representantes, al servicio de las luchas, el avance de la conciencia y la organización de la clase obrera. Eran mandatos utilizados para fortalecer las trincheras y la lucha directa de la clase obrera y para poner el desorden en las trincheras de la burguesía, para así debilitar sus instituciones y abonar el camino para el poder obrero.
Por eso, en estas elecciones, todo obrero, todo trabajador o trabajadora con conciencia de clase necesita defender un proyecto que fortalezca y esté al servicio de las luchas inmediatas de la clase, en estrecha vinculación con el objetivo de avanzar en la movilización y la organización de los de abajo, en el camino de la construcción de una nueva sociedad.
En estas elecciones, es útil votar y hacer campaña por los candidatos del PSTU, participando en las luchas de hoy, preparando las de mañana; organizando nuestras fuerzas para cambiar de una vez por todas todo lo que está allí. Cada voto en los candidatos del PSTU fortalece este proyecto.
Necesitamos que vengas y nos ayudes en esta campaña.
Traducción: Anita.