Reproducimos a continuación la nota de nuestros compañeros del PSTU de Argentina, nuestro partido hermano miembro de la Liga internacional de los Trabajadores-cuarta internacional, sobre el acto unitario del próximo 18 de octubre:
Estamos en las últimas jornadas del juicio contra Daniel Ruiz y César Arakaki, un juicio plagado de vicios al servicio de la Fiscalía encabezada por Juan García Elorreo y autorizado por el juez Javier Ríos. Juez que permitió la presentación de más de cien testigos, mayoritariamente policías y miembros de la defensoría del pueblo de Jorge Amor, mientras que a nuestra defensa solo le aceptaron dos testigos.
A pesar de todas estas irregularidades fueron incapaces de mostrar una prueba que determine la culpabilidad de Daniel o César. Esto está lejos de determinar la absolución, ya que el objetivo de esta Justicia es dejar sentado que todo trabajador o trabajadora que esté dispuesto a defenderse de la represión del Estado va a ser preso y criminalizado, porque ellos están para garantizar la impunidad del poder político y empresarial. Una muestra son los reacomodamientos de Comodoro Py y la Corte Suprema apenas terminadas las PASO.
Ellos saben que las medidas que se vienen después de las elecciones irán acompañadas con palos por parte del Gobierno, como el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Mientras que el hambre en los barrios es cada vez más grande, los precios de los alimentos siguen subiendo, los grandes productores agropecuarios baten récords de ganancias y los dirigentes sindicales brillan por su ausencia, aunque las patronales avanzan con reformas laborales de hecho.
Es por esto que el día 18 de octubre convocamos a un gran acto unitario en las puertas de Comodoro Py de todos aquellos que estamos por el derecho a la protesta, contra la criminalización y la defensa de las primeras líneas.
En este final de juicio, Daniel Ruiz y el PSTU vamos a seguir denunciando lo mismo que denunciamos desde el 2017, que no esperamos absolutamente nada bueno de esta Justicia y que lejos de defender a los trabajadores, está para cubrir a los intereses del poder.
Por otro lado vamos a seguir impulsando la autoorganizacion de los sectores en lucha y la necesidad de defendernos de la represión del Estado a través de sus fuerzas de seguridad, como lo hemos hecho el 18 de diciembre de 2017 y como lo hicieron las primeras líneas en las movilizaciones de Chile, Colombia, Hong Kong etc.
Estas luchas son el ejemplo de que nadie nos va regalar nada y los únicos capaces de garantizar nuestras necesidades somos nosotros mismos tomando los problemas en nuestras manos. Organizándonos para ir en busca de las tierras para tener el derecho a una vivienda, ir a los mercados a buscar los alimentos que nosotros producimos, combatir la violencia machista y frenar el saqueo de nuestros recursos naturales.
Mientras empresarios y corruptos pasan sus días tranquilos a la espera de una sentencia de juicio, a los luchadores lo ponen primero presos y después se sabrá la sentencia. Nadie le devolverá los días presos a Arakaki, Ponce, los meses que lleva Sebastián Romero y el año de Daniel Ruiz, pero ningún trabajador o trabajadora olvidará esto y pronto se hará justicia popular con todos los responsables políticos y policiales por parte de la clase obrera.